Destino: Santa Marta – Segunda parte

Es de mañana, nos despertamos relativamente temprano a pesar de lo tarde en que nos acostamos, no había tiempo que perder, salimos por una ducha y seguidamente rumbo al restaurante de la mamá de mi amigo a tomar el desayuno, disfrutamos de unos ricos huevos, con patacón, queso, caldo y café y decidimos que todo el día lo íbamos a pasar en Buritaca para descansar un poco de aque viaje tan largo.

La primera actividad después de desayunar fue dar un paseo rio arriba del rio Buritaca, donde una lancha nos llevaría un kilómetro adentro de sus refrescantes aguas y disfrutar del hermoso paisaje que nos ofrece el lugar, después bajamos de la lancha y disfrutamos del rio por alrededor de una hora y finalizamos el recorrido volviendo al mar pero esta vez no fue en lancha si no en kayak.

Era la primera vez que practicada este deporte y fue algo divertido lograr la coordinación con mi compañero para poder avanzar ya que al principio dábamos vueltas en círculos pero al final dominamos la técnica y pudimos llegar nuevamente al lugar de donde habíamos salido con la lancha, mientras reíamos un poco de nuestros amigos que no dominaron tan bien el kayak y llegaron con algo de dificultad.

Cruzamos en lancha al otro lado del rio para esta vez entrar al mar tomar algo de sol y sacar algunas fotos, nos divertimos bastante, ahora era momento de almorzar, al llegar al restaurante nos encontramos con otros moto viajeros habían unos que venían de Santa Marta, otros de Bucaramanga así que aprovechamos para intercambiar algunas historias de viaje y como no fortalecer esta hermandad motera.

Paso la charla motera y el almuerzo, ahora era tiempo de volver al mar y mar tarde recorrer un poco de Buritaca hacer algunos ajustes a las motos para poder salir a Palomino o a Santa Marta, aun teníamos esa duda pero no era el momento de preocuparnos por ello si no mas bien disfrutar del ahora en tan magnifico lugar.

A la mañana siguiente decidimos ir a Santa Marta la razón de peso es que necesitábamos gasolina ya que habíamos llegado con la ultima tranqueada que habíamos hecho en carretera y a pesar de que en Palomino podíamos conseguir, necesitábamos unos repuesto para una de las motos, así que también pronto estuvimos listos salimos hacia Santa Marta.

Mi plan era llegar al centro histórico conocer un poco y luego buscar el repuesto pero al no comprender una señal del GPS tomé el camino equivocado y al parecer el retorno se encontraba algo lejos. Mas adelante encontramos una estación de combustible por lo que decidimos parar y abastecernos para continuar con el recorrido y mirando una posible ruta para volver encontramos que estábamos cerca del Camino que lleva a Taganga, uno de los lugares mas bellos que hay en en Santa Marta así que cambiamos planes y nos dirigimos a conocer tan bello lugar.

La ruta comenzaba por un pequeño ascenso de una vía un poco estrecha y algo sinuosa y que cada vez se elevaba mas; al llegar a la cima empieza en descenso y se empieza a ver una maravillosa vista donde pudimos contemplar el mar de un azul tan oscuro que jamas lo había visto. el ritmo de ruta bajo considerablemente y esperábamos encontrar un lugar donde pudiéramos apreciar tan hermoso paisaje y por fortuna lo encontramos mas adelante.

Dejamos nuestra motos en un costado de la carretera y simplemente nos quedamos admirando tan bello paisaje que nos dejaba sin aliento. aprovechamos para sacar fotos y llevarnos este recuerdo para siempre, ahora era momento de de continuar y admirar mas de cerca este bello paisaje que nos regalaba la naturaleza y claro disfrutar de el tanto como se pueda.

terminamos de bajar la montaña y encontramos un lugar donde dejar las motos y encontramos una persona que nos ofreció un tour en bote con la posibilidad de hacer careteo y contemplar algunos peces que habitan el lugar. Ninguno de nosotros había hecho esto antes, así que sin pensarlo mucho abordamos el bote que nos llevaría a vivir esta gran experiencia, tomamos el bote y algo así como 5 minutos después ya estábamos nadando y contemplando una gran variedad de peces, tratamos de fotografiarlos pero ninguna quedo bien así que que volvimos al bote y terminamos el recorrido en una hermosa playa de blanca arena y refrescantes aguas.

Decidimos regresar por las motos y seguir por nuestro recorrido por el lugar, pasamos por el puerto y seguimos bordeando la playa y tomamos el camino que nos llevaría al Rodadero,al llegar allí recorrimos un poco el lugar compramos algunas cosas y disfrutamos de sus playas y un hermoso atardecer indicándonos que era momento de volver a nuestro campamento y descansar para disfrutar de un nuevo día en este bello lugar.