Destino : San Carlos

Días después del viaje a la costa, aleja tuvo un nuevo daño. Esta vez fue mas grave que el daño anterior y fue por mi culpa. Antes de viajar para la costa se realizó una pequeña jornada de mantenimiento a nuestras motos y encontramos que la cadena estaba un poco torcida pero que aguantaba el viaje; antes de regresar de nuevo a la ciudad se volvió a tensionar. Después del viaje la moto comenzó con un sonido raro pero no le preste atención y un par de días después me paso factura este descuido.

La cadena quedó muy tensionada y esto provocó que se partiera el eje en la caja de cambios y nuevamente me quede un mes sin moto. Durante este tiempo los muchachos realizaron una rodada al municipio de Alejandría donde por primera vez se incluyó un tramo de ruta en carretera sin pavimentar. Para muchos les pesó hacer esta ruta pero algunos quedaron con ganas de seguir rodando por este tipo de terreno pero esta vez menos agresivo, así que el próximo destino era San Carlos. Ubicado en la región del Oriente Antioqueño, rico en recursos hídricos con hermosos paisajes de verdes montañas.

Con la moto ya reparada y con muchas ganas de volver a rodar, sin pensarlo dije si a esta salida a pesar de estar enfermo y de que el viaje tenía tramos de clima frío con riegos de lluvia con más posibilidades que enfermar mas. Muy temprano llegué al punto de partida y después de las indicaciones previas a cada salida haciendo una idea de la ruta a tomar, salimos por la autopista hacia Bogotá y en peaje del municipio de Santuario tomamos un pequeño desvío rumbo al Municipio de granada, por una carretera angosta pero bien pavimentada con una gran cantidad de curvas cerradas, haciendo que el ritmo de la rodada bajara sustancialmente.

Algunos kilómetros más adelante llegamos a la cabecera municipal de Granada, pasamos el pueblo y mas adelante la vía sin pavimentar con tramos de solo tierra y algunas veces con rocas más grandes, luego rocas del tamaño de un balón de fútbol que complicaban la conducción y el riesgo de caer aumentaba con cada tramo que avanzábamos y para complicar la situación comienza a llover y aparecer un poco de niebla.

Afortunadamente nadie se cayó y la carretera volvió a ser tierra firme, la lluvia cesó, pudimos detenernos a descansar y sacar algunas fotos. Unos kilómetros más la carretera volvió a ser pavimentada, pudimos acelerar más el ritmo y cerca al medio día llegamos a nuestro destino y después de pedir algunas indicaciones llegamos al lugar planeado, una imponente cascada con un buen lugar para nada y refrescarse porque el calor ahora empezaba a hacer de las suyas.

Como estaba enfermo no quería entrar al agua porque las aguas de esta región son muy heladas. Después del almuerzo todos se fueron al agua y no me quedó mas remedio que entrar al agua pero solo hasta la parte que me llegaba a las rodillas. algunas personas nos sugirieron de ir directamente al rio especialmente al una parte donde la rivera del rio parecía una playa y el agua era más fresca. Minutos después partimos a este lugar y efectivamente el paisaje era tal como lo describieron, esta vez me animé a entrar al río, subirme a una rocas y saltar al agua.

Al caer la tarde organizamos el regreso y cambiamos la ruta pasando por San Rafael y Guatapé, en medio de esa ruta me lleve uno de mis primeros sustos en ruta, se nos atravesó un grupo de gallinetas y me tocó frenar de emergencia y alcanzar a avisar a los compañeros que venían atrás, afortunadamente no pasó de un susto y continuamos nuestro camino. Al llegar a Guatapé hicimos una pausa para descansar un poco e hidratarnos, y tomar la autopista que nos llevaría a casa. finalizando una nueva aventura por las carreteras de mi tierra.