Destino: Pereira

La querendona, trasnochadora y morena

Pereira ha sido una de mis ciudades favoritas y a pesar de haber estado un par de ocasiones por motivos laborales y otro par como ciudad de paso durante alguna ruta, esta vez mi visita era por un motivo muy especial, se conmemoraba el 3 cumpleaños de nuestro club hermano Discover Pereira.

Por cuestiones laborables me decidí en inscribirme al evento un día antes y a pesar de que no me garantizaban cama mis ganas de salir a rodar con mis amigos y vivir una nueva experiencia motera en otra ciudad pudieron más que dormir con un poco de incomodidad.

Nos encontramos en nuestro punto habitual de encuentro cuando salíamos a rodar al sur de la ciudad, solo íbamos 5 integrantes del club y un invitado muy espacial, un motero con deficiencia auditiva el cual nos enseñó que para ser libre y disfrutar de la vida intensamente, no hay limitaciones que te detengan. Esta rodada en especial fue muy importante para mi ya que me permitió ver el mundo motero con otros ojos y me marco tanto como motero y como ser el humano que soy actualmente.

la ruta ya era conocida así que rindió mucho, en Irra paramos por almuerzo y de allí directo hasta Pereira. Al llegar, realizamos una pequeña parada cerca al viaducto donde descansamos un poco en la ruta y nos pusimos en contacto con la persona que nos llevaría hasta el lugar del evento, allí fuimos recibidos calurosamente por los anfitriones y nos acomodaron en el lugar donde pasaríamos la noche. Afortunadamente encontré una colchoneta y pasar la noche cómodamente.

Al llegar la noche comienza la integración nos reunimos al rededor de la piscina con música y buena comida, mas adelante con algunas cervezas disfrutamos del lugar y todo lo que nos ofrecía. Algunos bailaban otros los animaban, en fin nos divertimos hasta altas horas de la noche.

A la mañana siguiente desayunamos y salimos de rodada recorriendo toda la ciudad y finalizamos en el complejo deportivo donde aprovechamos para sacar algunas fotos de recuerdo, llegamos a la finca descansamos un poco y luego salimos de rodada nuevamente al norte denla ciudad dónde disfrutamos de un delicioso asado.

Al proximo día se realizó nuna serie de rifas de parte de los patrocinadores del evento, se intercambiaron calcomanías, se realizó una última integración antes de volver a casa.

Al regreso paramos a la salida de la Ciudad para comprar algunos dulces para llevar a nuestros seres queridos y partimos rumbo a nuestros hogares luego de dusfrutar de un gran fin de semana, llenode muchos amigos moteros que comparten esta pasion de las 2 ruedas