De vuelta por el barrio. Primera parte

Normalmente cuando estoy en un nuevo lugar, acostumbro dar siempre una vuelta por el barrio o por los alrededores de donde me encuentre y así conocer bien el lugar que me rodea, esto es con el fin de familiarizarme mas con el entorno. Ahora es el momento de hacer esto con mi moto, dar la vuelta por las regiones que rodean mi departamento es decir darle la vuelta al barrio.

Con el tiempo, las ganas de empezar a devorar carretera por cuenta propia y conocer lugares diferentes estaban rondando por mi cabeza y después del encuentro nacional, este anhelo se volvió realidad. Era mediados de diciembre y estaba en vacaciones del trabajo la cual fue excusa perfecta para planificar un viaje largo, solo faltaba un destino por elegir.

Manizales, fue tomado como destino tentativo; el viaje al primer encuentro nacional me permitió admirar nuevos paisajes y descubrir nuevas rutas, al pasar por Armenia y Pereira la única ciudad que quedaba por conocer del eje cafetero era la ciudad de Manizales, el detalle es que Manizales esta a un poco mas de 3 horas de Medellín, así que el viaje no seria tan emocionante ni largo si se realizaba por la ruta habitual, ademas el destino era sólo una excusa para salir a rodar.

durante varios días estuve planeando posibles rutas y destinos donde también tuve en mente pasar por Ibagué o ir hasta Bogotá. Le comenté la idea a algunos de los muchachos del club, pero por ser una época festiva muchos querían pasar estos días en familia y celebrando las fiestas que estar fuera de la ciudad un par de días y en moto. Acercándose la fecha de salida uno de los muchachos recién ingresado al club me comentó que justo había salido a vacaciones del trabajo y que me quería acompañar en la ruta, le comenté que la ruta tenia un destino tentativo mas no definitivo y que la idea era estar mas de dos días fuera de casa conociendo tantos lugares como nuestro presupuesto nos alcanzara una vez mas me dijo que si me acompañaba.

Finalmente llego el día, nos encontramos en un punto al sur de la ciudad de donde partimos a nuestra gran aventura. En esta ruta también me acompañó mi hermano menor que se encontraba en vacaciones de la escuela y como pensé que nadie más me acompañaba en ruta era bueno saber que alguien de la familia estaría con migo lo que me daba aun más confianza y tranquilidad.

Atravesamos la ciudad de sur a norte y tomamos la salida hacia el oriente antioqueño por la autopista Medellín – Bogotá, en caso de decidirnos visitar los otros destinos tentativos esta seria la mejor ruta a tomar pero también porque el viaje se haría mas largo, que fue la excusa inicial de esta rodada. Antes de llegar al municipio de Cocorná decidimos parar un rato en un mirador a bordo de carretera y contemplar un poco el majestuosos paisaje que se puede observar allí, veíamos al fondo la cabecera municipal de este municipio, a la izquierda una imponente cascada y si mirábamos al cielo veíamos como algunos mas arriesgados que nosotros volaban como pájaros en sus parapetes. aprovechamos la parada para estirar un poco las piernas, tomar algunas fotos y seguir rodando sin ningún afán.

Descolgamos Cocorná y llegamos ahora a Doradal un corregimiento del municipio de Puerto Triunfo en la región del Magdalena Medio antioqueño, allí paramos en la famosa hacienda Nápoles donde tomamos el desayuno y sacamos algunas fotos y nos tomamos otro descanso ya llevábamos casi 200 km de recorrido y apenas era un poco mas de medio día. el calor allí era insoportable por lo que después de un rato preferimos continuar en la ruta, llegamos luego a Puerto triunfo donde cruzamos al gran Rio Magdalena y nos encontrábamos ya en en Puerto Boyaća, Boyacá. continuamos por la ruta del Sol donde la velocidad máxima es de 100 km/h y pudimos aprovechar un poco de la velocidad y disfrutar de las largas rectas que nos ofrece esta vía.

Continuamos por esta ruta hasta puerto Salgar en el departamento de Cundinamarca y pasamos de nuevo el Magdalena llegando a La Dorada en el departamento de Caldas, allí paramos a almorzar y organizar donde pasar la noche, era un poco mas de las 3 de la tarde y no queríamos que la noche nos tomara por sorpresa en carretera. El resto de la ruta fue con un intenso calor a bordo pero con paisajes hermosos que permitían disfrutar mas del camino. llegamos al hasta Honda en el departamento del Tolima luego de unos 300 kilómetros recorridos y muchas horas de viaje nos dimos a la tarea de buscar donde quedarnos, hidratarnos y descansar, por recomendaciones de algunas personas decidimos continuar hasta San Sebastián de Mariquita donde finalmente nos hospedamos y decidimos pasar la noche esperando decidir cual seria el destino final de esta aventura.