De puerto a puerto

Finalmente era momento de regresar, a pesar de la caída, se pudo rodar y conocer bastantes lugares, también compartir un buen rato en familia y disfrutar como siempre de la ruta. Aprovechando que había una ruta que estaba en mis pendientes decidí viajar de puerto a puerto sobre todo el margen del rio Magdalena. Ésta ruta me llevaría de Puerto Berrio, pasando por Puerto Boyacá y finalmente a Puerto Triunfo para luego retornar a casa.

Tomamos el desayuno nos despedimos de nuestros familiares y tomamos rumbo hacia la ruta del sol que nos llevaría a nuestro destino; ésta vez giramos a la derecha y no a la izquierda cuando tomamos la ruta hacia Barrancabermeja y continuamos por una espectacular ruta a doble calzada que permitía llevar un buen ritmo pero también disfrutar de su hermoso paisaje.

La dicha no fue por mucho tiempo pues la carretera en muchos tramos estaba bastante deteriorada, con mucho desnivel y algunos huecos empezaron a disminuir el buen ritmo que se llevaba, junto a eso la carretera aun no estaba terminada por lo que en ocasiones la vía se volvía en calzada sencilla y tocaba estar un buen rato detrás de los grandes vehículos de carga.

Aún así ésto es parte del paseo y de la ruta por lo que lo único que hay que hacer es disfrutar de ello. Así llegamos hasta Puerto Boyacá donde hicimos un pequeño alto en el camino y vimos que aun era algo temprano para almorzar y que Puerto Triunfo no estaba a mas de 20 minutos de allí, por lo que continuamos por una carretera un poco mejor.

Al llegar a Puerto Triunfo el calor ya empezaba a hacer de las suyas así que rápidamente tomamos el desvío que nos llevaba hasta la cabecera municipal, la carretera era estrecha y un poco descuidada por lo que también se cruzó con mucha precaución. al llegar hasta el parque principal nos recibió un hermoso faro al borde del rio Magdalena y una especie de Malecón a un lado del rio.

Al lado del parque una locomotora vieja hacia de monumento de los años de gloria de aquel ferrocarril y mas allá una cuantas esculturas de los animales de la región nos llamó la atención. Dejamos la moto a un lado y tratamos de subir hasta lo mas alto del faro pero descubrimos que a mitad de camino estaba cerrado, los lugareños nos indicaron que lo abrían después de las 2 de la tarde y como faltaba aun mucho no pudimos subir mas; pasamos entonces al lado del tren sacamos fotos de el y los animales recorrimos el parque y miramos algún restaurante que nos llamara la atención pero no vimos alguno, así que decidimos continuar la ruta hacia Doradal.

Antes de llegar a Doradal, paramos en la entrada del parque temático de la hacienda Nápoles donde nos tomamos la foto en la entrada y de allí almorzar para continuar la ruta a casa por la autopista Medellín – Bogotá. Después de todo pasamos un buen fin de semana y se puedo rodar como era esperado.